Ahora que estamos viendo a los candidatos haciendo campaña política querido lector, no se deje engañar. Observa muy bien. El cuerpo habla por sí mismo. Puedes decir muchas cosas con la boca, pero el cuerpo siempre hablará. Podemos manejar la cara a nuestra manera para fingir o para encubrir lo que realmente sentimos.
El cuerpo tiene que conseguir lo que el alma siente. el cuerpo refleja muy precisamente el estado emocional de la persona. Mentimos con la cara porque es lo que aprendimos desde la niñez, nuestros padres, principalmente, y la sociedad nos han enseñado en nombre de la armonía y el bienestar “de la comunidad” a parecer contentos o felices. «Al mal tiempo, buena cara». Ponemos cara de felicidad y salimos al mundo.
Pero algo siempre nos delata ese estrés, malestar, dolor, pena, nerviosismo o ansiedad que llevamos dentro y suelen ser nuestros pies o piernas. Cuando nos sentimos desesperados, los pies comienzan a temblar o patalear. Tendemos a mover nuestros pies en la dirección de lo que nos gusta, disfrutamos o nos atrae.
Si estamos conversando con una persona que nos gusta o nos gusta, nuestro torso y pies van hacia ella, cuando no, nuestros pies van hacia el lado opuesto. Si alguien está parado hablando con un pie afuera y el otro adentro, quiere decir que quiere terminar y marcharse, es un buen indicador de cuándo levantarse e irse.
Nuestra forma de caminar también dice mucho del estado de ánimo en el que nos encontramos, si estás feliz y emocionado parece que estás flotando. Según Joe Navarro, Antiguo agente del FBI, el cerebro límbico se manifiesta en nuestros comportamientos no verbales. Por ejemplo, si estamos contentos solemos poner el talón con la puntera hacia arriba. Obviamente hay gente que sabe controlar estos movimientos para poder mentir, pero es difícil que se vea y se sienta natural.
Los siguientes consejos le ayudarán a evaluar a las personas:
1. Observe el movimiento, la postura, los gestos y las expresiones faciales de la persona. ¿Qué te transmite?
2. Contacto visual: El contacto directo y constante indica sinceridad y conexión, pero evitarlo puede sugerir falta de interés o inseguridad.
3. Observe las expresiones faciales, especialmente mientras escucha a los demás. Si son exagerados o inconsistentes, pueden sugerir que lo que se dice no es cierto.
4. El tono de voz es muy importante, ¿es firme o monótono? ¿Es tembloroso o agresivo?
5. Congruencia entre lo que la persona dice y lo que hace. Cuando hay incoherencia, hay que dudar.
Aprender a descifrar la comunicación no verbal de las personas me resulta muy interesante y muy necesario, es una herramienta tanto para la vida profesional como personal. No todo es lo que parece, no todos dicen lo que sienten, no todos dicen la verdad, por eso saber leer a las personas es fundamental.
Otro código de comunicación muy acertado es la imagen de las personas, la vestimenta, la disposición, qué y cómo se visten dice mucho sobre las verdaderas intenciones de alguien, tanto es así que cuando los políticos hacen campaña contratan a personas especializadas en diseño de imagen que les dice exactamente qué colores usar. , cuándo y cómo, qué tipo de ropa, peinado, maquillaje y complementos para enviar los mensajes adecuados a tu público objetivo.
Ahora que estamos en época de elecciones políticas, presta mucha atención a todos estos pequeños detalles, no solo en el discurso, ahí es donde encontrarás la verdadera esencia de las personas. Lo que vestimos influye en cómo nos tratan los demás, nos guste o no, por eso es importante que lo que vestimos envíe un mensaje coherente con lo que somos y nos ayude a ser percibidos positivamente. Uno de los primeros síntomas de depresión en una persona es dejar de arreglarse y cuidarse.
Para mí se ha convertido en un capricho buscar pistas para descifrar lo que significan.
POR BRENDA JAET
MAÍZ