Miriam, una joven originaria de la Ciudad de México, vivió una verdadera pesadilla al visitar el destino turista de Mazatlán Sinaloa, durante esta semana junto a su marido y su perro, Rocoso, luego de que la asaltaran y le quitaran su vehículo; Sin embargo, no solo le quitaron sus pertenencias a la joven, sino también a su peludo amigo y fiel compañero.
En el trabajo periodístico realizado por Dilan Gómez de la televisora del Ajusco, revela que la pareja junto con su cachorro «Rocoso«, habrían pasado unos días en el puerto Mazatlánquienes al finalizar su viaje en su vehículo particular, decidieron cenar al norte de esta ciudad en el Avenida Carlos Canseco.
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Así le robaron la camioneta a Miriam y su perro
Cuando la pareja terminó de cenar, dos hombres armados ya esperaban para arrebatarles las llaves de su vehículo; Sin embargo, los delincuentes no se dieron cuenta de que en su interior entraba un ángel de cuatro patas.
Según testimonios de Miriam en la entrevista realizada por el canal 1.1, su esposo fue arrojado al suelo y como ella ya estaba a bordo del vehículo, le pidieron que se bajara, quienes pidieron a los delincuentes que la dejaran bajar hasta ella. joroba del vehículo.
La pareja pide pistas para encontrar a Rocky
Miriam confesó que uno de los delincuentes sí la dejó escapar; Sin embargo, la dueña de Rocky reveló que su perro es muy nervioso e intenso y tiene un ladrido muy impresionante, motivo por el cual se asustó. Ante esto, los ladrones le dijeron que ya no lo iba a sacar de la camioneta, por lo que huyeron con el perro dentro del auto.
Asimismo, los delincuentes prometieron que bajarían al perro más adelante en la vía, por lo que Miriam y su esposo caminaron en dirección a donde había huido el vehículo y a pesar de la exhaustiva búsqueda que realizaron minutos después de ser despojados de la camioneta, fueron incapaz de encontrar el vehículo. encontrar a Rocky.
Rocky, una raza de schnauzer gigante negro, aún no ha aparecido. Respecto a la pareja, lo que más les importa no es recuperar la valiosa camioneta, sino volver a tener en sus brazos a su fiel compañero peludo.
«No quiero la camioneta, solo quiero a mi perro», dice la víctima y pide que le digan dónde la dejaron.
DRV