LONDRES — Zahra Joya pasó años investigando la corrupción gubernamental en Afganistán y documentando la violencia cometida durante la guerra, especialmente contra las mujeres, un brillante ejemplo de medios libres que alguna vez fueron prósperos.
Cuando la joven de 29 años se fue en agosto, fue parte de un éxodo de periodistas que huyeron de los talibanes por temor a represalias y cuya partida dañó gravemente a la naciente industria de los medios de comunicación.
Fuente: WSJ