Él credito principal ¿Qué tiene de malo? Javier Milei para llevar a cabo el inicio de su gestión es el apoyo que obtuvo en las urnas. Cuando el círculo rojo de la política esperaba un resultado ajustado, y No descarté una victoria de Sergio Massael economista libertario obtuvo una contundente victoria por más de 11 puntos.
La cuestión central es qué tipo de garantía implican. casi 15 millones de votos quien lo consagró como el próximo presidente. Este no es un tema menor: el propio Milei hizo campaña describiendo una situación crítica para la economía y, en entrevistas posteriores a la segunda vuelta, habló de una entorno monumental.
¿Pero la gente que votó por él está dispuesta a aguantar esto? Clarín accedió al primera encuesta el cual indagó sobre las expectativas del nuevo gobierno. Y deja números interesantes.
Es un estudio de CB Consultoría Opinión Públicauna de las firmas que vaticinó la victoria de La Libertad Avanza e incluso había pronosticado que Massa terminaría primero en las elecciones generales y Patricia Bullrich quedaría fuera de la segunda vuelta.
En un estudio nacional de más de 2.000 casosapariencia de bota Dos datos positivos para Milei. Efecto ganador típico. Por ejemplo, mejoró notablemente la imagen que la gente tiene de él. Pasó de tener casi tantos apoyos como rechazos a terminar con un diferencial claramente favorable: 59% valoración positiva y 33,7% negativa.
Aunque no son cifras destacadas, para ponerlas en contexto, todos los políticos, desde hace ya un par de años, acaban fracasando cuando se investiga su imagen.
Algo similar sucede con el expectativas generadas por la próxima gestión. Los últimos años fueron tan malos que la mayoría de la sociedad solía mostrarse pesimista cuando se le preguntaba sobre lo que está por venir.
En esta encuesta, un 47,3% tiene «altas expectativas» para la presidencia de Milei y el 19,5%, «alguna expectativa». Los pesimistas («sin expectativas») se reducen al 29,4%. De nuevo: nada que celebrar, aunque sí un cambio de tendencia.
Pero cuando a esos mismos entrevistados se les pregunta qué tan grande debería ser el ajuste libertario, más del 50% pide un recorte «moderado», sin tocar la educación, la salud pública y los aspectos sociales.
Es la sintonía fina (y no tan fina) que debe tener el arranque de la administración libertaria. Motosierra con dientes romos. Hay cierto acuerdo, si no unanimidad, en que La buena suerte para el gobierno de Milei se jugará en los primeros meses de su gestión.
La relación con la Justicia
Otra de las noticias del día fue la visita del próximo Ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, a la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Si bien fue un acto protocolario, también dejó señales de lo que está por venir.
La mera presencia del futuro funcionario fue «una cantina en el desierto», según una fuente bien informada sobre los avatares judiciales. La Corte, en particular, vive momentos de extrema tensión con el Gobierno saliente.
En el Congreso se realiza un juicio político contra la Corte Suprema, que incluso podría tener un fallo antes del cambio del 10 de diciembre. Milei ya se pronunció abiertamente en contra del proceso.
Además, el presidente electo hizo un anuncio que fue especialmente bien recibido en Justicia. Dijo que impulsará una ley para que el presupuesto de ese poder provenga de una partida específica, sin necesidad de que sea aprobado, mes a mes, por el Jefe de Gabinete nacional. Independencia económica = independencia judicial.
Con información de: Telam, AF News y OpenAi