El arresto de un delincuente condenado en dos ocasiones condujo a una investigación de seis meses realizada por varias agencias que descubrió una red de tráfico de drogas y armas a gran escala que resultó en 20 arrestos y más por venir, anunció el martes el sheriff del condado de Seminole, Dennis Lemma.
Lemma dijo que la investigación también frustró un complot de asesinato a sueldo y una entrega de drogas con drones a una prisión.
«La escala de esta investigación ejemplifica la importancia de la colaboración entre las agencias policiales y subraya nuestro compromiso de combatir los narcóticos ilícitos en nuestras calles, especialmente el fentanilo y el crimen organizado asociado», dijo. Dio crédito a la Fiscalía del Estado por su “apoyo crucial”.
Lemma dijo que la Oficina de Investigación de la ciudad y el condado de Seminole descubrió una operación responsable de distribuir una variedad de drogas ilegales, incluidas cocaína, fentanilo, heroína, metanfetamina y un estimulante conocido con el nombre callejero «molly», así como contrabando de marihuana al estado. La red criminal también vendía armas de fuego de alto poder, incluidas ametralladoras.
La oficina es un grupo de trabajo formado por agentes de la Oficina del Sheriff y los departamentos de policía de Altamonte Springs, Lake Mary, Longwood y Sanford.
La investigación se llevó a cabo en fases con agentes encubiertos comprando drogas y armas de fuego a Floyd Aikens, el delincuente convicto, y sus asociados, dijo la Oficina del Sheriff en un comunicado de prensa.
La primera fase, denominada “Operación Hielo Negro”, incluyó 24 compras encubiertas de drogas, por un total de más de 160.000 dólares, de las que se obtuvieron cuatro libras de fentanilo, tres libras de heroína, cinco libras de metanfetamina, otras drogas y 10 armas de fuego.
Más de 40 libras de cocaína y otras 13 armas de fuego fueron incautadas en una residencia vinculada a la investigación. Los agentes también interceptaron una operación con drones destinada a contrabando a un centro penitenciario estatal en el norte de Florida.
Según el comunicado de prensa, los agentes arrestaron a un gerente de distribución de UPS que interceptó paquetes de drogas con direcciones falsas y luego los entregó personalmente a personas involucradas en la investigación.
La segunda fase detuvo a sospechosos en los condados de Seminole y Orange, involucrando a múltiples agencias policiales, el Departamento de Aplicación de la Ley de Florida, la Administración de Control de Drogas y la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego.
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