Tuvo que pasar más de un siglo para que se inaugurara otro puente ferroviario entre México y Estados Unidos, y en 2015 finalmente se puso en marcha el puente Matamoros-Brownsville, que requirió una inversión de más de mil millones de pesos. triplicar la velocidad de los trenes y aumentar la capacidad de carga de 12 a 24 millones de toneladas por año.
Siete años después, el 31 de octubre comenzará la construcción del segundo puente ferroviario entre las ciudades fronterizas de Nuevo Laredo, Tamaulipas y Laredo, Texas, con una inversión de más de 80 y 100 millones de dólares realizada por Kansas City Southern Mexico (KCSM) .
El pistoletazo de salida de esta importante labor se da justo cuando la actividad comercial entre México y Estados Unidos, impulsada por el T-MEC, alcanza un nuevo récord. Según datos de la Oficina de Estadísticas de Transporte de Estados Unidos, en agosto el valor de las importaciones y exportaciones alcanzó los 70 mil 298 millones de dólares, lo que representa un aumento de 24,9%, respecto a igual mes de 2021.
Mientras que en el transporte ferroviario el movimiento fue de 7 mil 792 millones de dólares, lo que representó un incremento de 15.8% respecto al periodo de comparación. Por ferrocarril se movilizó el 11,08% del comercio entre ambos países.
Recordemos que aproximadamente el 80% de nuestras exportaciones se envían a territorio estadounidense y, a su vez, Estados Unidos es el primer proveedor de México con una participación del 50%. El 80 por ciento del comercio bilateral se realiza por tierra y ferrocarril, aunque el transporte de carga domina ampliamente.
Hablamos de que el autotransporte aportó 48 mil 328 millones de dólares, lo que representó un aumento de 21,1% respecto a agosto. Aportando el transporte de motor el 68,7% del total de la actividad.
Vale recordar aquí el estudio del Banco de Desarrollo de América del Norte identificó que en los Pasos Fronterizos y Puentes entre México y Estados Unidos solo siete operan con vías férreas. Según esta información existen 59 pasos fronterizos entre los dos países; 55 están en operación y cuatro cerrados: Ferroviario de Ojinaga-Presidio, en Chihuahua-Texas; Cañón La Linda-Heath, en Coahuila-Texas; Puente Colgante Miguel Alemán-Roma, en Tamaulipas-Texas, y Caseta-Fabens, que fue reemplazado por el puente Guadalupe-Tornillo, inaugurado en 2015.
Los siete cruces que cuentan con vías férreas para atender el cruce de trenes de carga son: Brownsville – Matamoros; Laredo-Nuevo Laredo; Eagle Pass – Piedras Negras; El Paso – Ciudad Juárez (2 cruces); Nueces – Nueces; Caléxico-Mexicali; y San Ysidro-Tijuana.
Ahora bien, Tamaulipas es el estado mexicano que tiene el mayor número de cruces activos: 18, y equivalen al 32.7% del total. En Estados Unidos, el estado de Texas cuenta con 33 cruces activos, que representan el 60% del total.
En ambos Laredos se recibe con alegría la noticia de este segundo puente que duplicará la capacidad de Kansas City Southern Mexico (KCSM), al pasar de un promedio de 30 trenes diarios a 62 cuando el proyecto esté listo.
Y a esto hay que sumarle el megaproyecto para construir un tren T-MEC que vaya de Canadá a México. Kansas City Southern y Canadian National Railway ya recibieron la autorización para fusionarse y crear el primer tren que conectará Canadá, Estados Unidos y México. Creando así la primera red que uniría a los tres países conectando puertos.
Este proyecto combinará los aproximadamente 32.000 km de vías férreas de CN con la red ferroviaria de 11.000 km de KCS. Y es que como señalan las empresas, el primer tramo comienza en Canadá y finaliza en el Golfo de México, mientras que el segundo conecta las granjas del Medio Oeste estadounidense con nuestro país.
Así, se abre un nuevo panorama logístico para nuestro país, que podrá continuar su desarrollo económico a través del comercio exterior, aprovechando las ventajas del transporte ferroviario de aquí a Canadá y de regreso: Gran capacidad: permite el transporte de grandes cantidades de mercancías a largas distancias; Bajos costos de operación; Flexibilidad: es posible transportar variedades de mercancías; Baja siniestralidad: muy rara vez tienen accidentes; Poco contaminante; Evitar los problemas de congestión del tráfico; Ofrece la posibilidad de intermodalidad con otros medios de transporte.
POR JOSE IGNACIO ZARAGOZA AMBROSI
EXPERTO EN COMERCIO EXTERIOR
@IGNAQUIZ
MBL