Las gafas de realidad mixta anunciadas crean problemas en la cadena de suministro. La empresa se vio obligada a reducir su producción.
Luego de una suntuosa presentación, donde todo fue glamour y dicha, casi un mes después de su anuncio, las aristas más afiladas del Apple Vision Pro comienzan a asomar.
El gran inconveniente de estos lentes de realidad mixta Es su complejo proceso de fabricación y el cambio de directivas que esta novedad genera en la producción.
porque diseño complejo que cuenten con estas lentes, la firma de Cupertino se vería obligada a realizar drásticos recortes en la producción de su dispositivo.
Algunos medios especulan que estos ajustes fueron motivados por la bajas expectativas en ventas, debido a su alto precio. Pero por el momento, no hay confirmación oficial del problema.
En un reportaje al que accedió Financial Times, se detalla el motivo de tan largo tiempo entre la presentación del dispositivo y su llegada a las góndolas.
La razón principal son los problemas de la cadena de suministro y no el tiempo que Apple quiere dar a los desarrolladores para que tengan tiempo de crear o implementar sus aplicaciones por su gran innovación.
El gran obstáculo es crear pantallas internas resolución, mientras proyecta los ojos del usuario al mundo exterior. El problema es el ajuste fino de las dos pantallas micro-OLED y la lente lenticular curva que usa el dispositivo.
Apple también está trabajando en una versión más asequible de los auriculares con fabricantes de pantallas coreanos.
Estos proveedores asiáticos aseguran que la empresa habría pedido una cantidad suficiente de componentes para fabricar entre 130.000 y 150.000 unidades en el primer año del Apple Vision Pro.
Todos estos los números son dramáticamente menos de un millón de unidades previsto por Apple para los primeros doce meses de su Vision Pro.
En vista del retraso, Apple recortaría la producción del Apple Vision Pro. De hecho, podrían ser menos de 400.000 unidades en 2024, según fuentes cercanas a la compañía y a Luxshare, el fabricante chino que se encargará de montar el dispositivo.
Una apuesta arriesgada
Como parte de la experimentación, Cupertino habría explorado el uso de la tecnología mini-LED para reducir los costos de producción.
Sin embargo, los resultados no parecen haber sido los esperados, por lo que seguirían insistiendo en usar micro-OLED incluso en modelos no Pro.
Esta versión más asequible del Apple Vision Pro llegaría en 2025, un año después del lanzamiento oficial de la primera generación. Eso sí, primero habrá que esperar a que consiga solucionar los problemas que parecen afectar a la producción del gadget más esperado hasta la fecha.
El Vision Pro, presentado el mes pasado, es su última apuesta para mantener su volumen de ventas e intentar impulsar la industria de la realidad mixta que durante años ha luchado por convertirse en la principal tendencia.
El dispositivo, similar a las gafas de esquí de alta tecnología, tendrá su propio sistema operativo, visionOS y una App Store dedicada. Está previsto que llegue a principios del próximo año a Estados Unidos, y más tarde a otras regiones.
SL