En una entrevista exclusiva con CubaNet, El joven relata su viaje para escapar del régimen cubano y llegar a Miami, desde donde cuenta su historia.
Osbel fue sometido a un juicio sumario en el que solicitaron 15 años de prisión. Su caso se extendió por todo el país, pues su rostro fue protagonista de un video en el que se lo cataloga como un “delincuente vulgar” que aprovechó la manifestación para tomar una caja de jugo de una tienda en MLC y beberlo. Un joven de 17 años con discapacidad intelectual fue encarcelado en Cuba por robar jugo.
¿Cuál fue su situación en Cuba?
Estaba bajo arresto domiciliario en Cuba, llevaba casi dos años bajo esa modalidad, tenía una sanción de cinco años. Entonces, cuando fui y pregunté a las personas que tenían que ver con mi caso, me dijeron que la única manera de recibir una sentencia reducida o que me quitaran la sentencia era si empezaba a delatar a otros miembros que habían estado en las protestas del 11 de julio. . Respondí que tenía derecho a una pena reducida si me portaba bien, si no cometía ningún delito.
¿Cuanto fue tu sentencia?
Cinco años.
Pero la petición inicial ¿de cuánto era?
15 años de prisión.
¿Por qué delito?
Sedición. Pero me acusaron sin pruebas.
Supuestamente dijeron que yo había dado la vuelta al gobierno, pero no tenían pruebas. Sólo salió una persona vestida con ropa similar a la mía, de espaldas al auto volteado, y dijeron que era yo. Y ni siquiera el experto pudo identificar que era yo.
Aun así quisieron sancionarme para no decir que el Gobierno cubano se equivocó.
La solicitud fue por 15 años y ¿por cuánto tiempo te quedaste?
Permaneció en el asilo durante cinco años. Pero después de dos años comencé a recibir mucho acoso por parte de las autoridades cubanas.
Comenzaron a ir a mi casa, a amenazarme con que si cometía cualquier otro delito iría preso, que denunciaría a las otras personas que estaban involucradas en esas protestas, que cuando hubiera otra protesta me encerrarían. de nuevo. Entonces hubo rumores de protestas, de que iba a haber más protestas. Tenía mucho miedo de que me volvieran a arrestar y terminara de cumplir mi condena en prisión.
Entonces me pararon y me dieron una advertencia y me dijeron “va a haber protestas, tú sabes que si te metes vas a ir preso”. Y empezaron a decirme cosas así, amenazándome, intimidándome. Por miedo a que eso sucediera, decidí huir de Cuba.
¿¿Y huiste por mar con un amigo?
Me escapé por mar con unos amigos, sí.
Preso político del 11J Osbel Núñez Frómeta
¿Cómo fue tu llegada a Estados Unidos?
No llegué a tocar suelo americano. En aguas internacionales, en el barco en el que íbamos, el motor se incendió, empezó a echar humo y quedamos varados en medio del océano.
A los pocos minutos llega un barco guardacostas, parece que por el mismo humo, la vela, viene un barco guardacostas y nos intercepta. Nos dicen que de donde somos somos cubanos y nos suben al barco inmediatamente.
En el momento que empiezo a pedir asilo político, empiezo a gritarle, a arrodillarme y decirle que soy un preso político, que no puedo regresar a Cuba porque me espera una sanción muy fuerte. Pedí asilo, me dijeron que sí, que no había ningún problema, que me iban a hacer la entrevista de miedo creíble. Allí me piden que cuente toda la historia desde el 11 de julio, todo.
Les muestro pruebas reales, verdaderas de mi solicitud de 15 años de prisión, todo. El abogado de Prisoners Defenders, Javier Larrondo, me ayudó mucho, ya que me firmó una carta que decía que no podía regresar a Cuba por ningún motivo porque soy un preso político. Cuando vieron la carta me creyeron un poco más y entonces empezaron a hacerme ver como un caso de asilo político.
Vine con otro amigo mío que también estaba siendo acosado en Cuba, pero no tenía pruebas de que fuera un preso político, entonces no lo aprobaron y se quedó en el barco. A todos los que vinieron en el barco a Cuba se los llevan y a mí me dejan en paz. Me pasaron de un barco a otro. Estuve en ello durante 25 días. A los 25 días me llevan a tierra, a un hospital de Broward, me hacen un análisis de salud porque padezco problemas mentales, y en Cuba no me atendieron.
Cuando estuve preso en Cuba por lo mismo el 11 de julio, los días que estuve investigado, me dieron muchas pastillas, me dieron sobredosis de pastillas, me maltrataron. Me golpearon mucho.
¿Cómo fueron esos días de detenciones? ¿Cuantos fueron?
Fue una semana de arresto.
¿Cómo fue, cómo te trataron, cómo fueron los interrogatorios?
Llegaron al calabozo y me dijeron: “Oye, ya llegó tu pedido, son ocho años de prisión, pero si nos dices ahora mismo miembros que estuvieron contigo en la protesta, te liberamos ahora mismo a tu casa”. .”
Y entonces les dije: “’No conozco a nadie que haya estado ahí’. ‘No, sí, ya sabes, te podemos liberar ahora mismo y parecerá que nunca estuviste en esto’”. Y les dije: “’No’. ‘¿No pero por qué?’ ‘No, porque sí fui a la protesta, sí sé por qué fui a la protesta, no fui solo para conseguir comida o para mirar, fui porque quiero libertad para el pueblo de Cuba’”. Y luego ellos Me empezaron a golpear, me golpearon, golpearon a dos personas más que estaban ahí por lo mismo que yo.
Y estuvieron todos esos días entrando y pegándome, como estaba tomando medicamentos para la depresión y la ansiedad, entonces cuando lo pedí optaron por no darme mi dosis, sino darme una sobredosis de medicamento. Y estuve un día entero durmiendo, dos días durmiendo, y en una ocasión hasta me trasladaron a otra celda, pensando que hasta me había muerto, porque no reaccionaba. Intentaron despertarme y no reaccioné. Los otros presos fueron los que me dijeron “oye, te creyeron muerta y por eso te metieron en la otra celda”.
¿Alguna vez visitaste a un médico esa semana?
No, tuve un ataque de ansiedad porque estaba en prisión, porque estaba encerrado en esa celda que era para ocho personas y eran casi 16. O sea, había mucha gente en una sola celda y tuve un ataque de pánico. Entonces después de insistir tanto para que me llevaran al médico porque me faltaba el aire, me sentí mal por las mismas sobredosis de medicamentos que me habían dado. Me sacaron con maltrato, las esposas estaban súper apretadas.
Allí me atendieron y en el camino me dijeron que iba a ir a un centro donde hacen carbón, que iba a estar preso muchos años haciendo carbón, trabajando para ellos, que yo era un perro, un gusano. , que ya lo era no voy a volver a ser persona en este país, me olvidaré de la vida.
¿A quién dejaste en Cuba?
En Cuba actualmente tengo a mi madre, tengo a mi hermana de cuatro años y a mis abuelos.
Y me decías que ya habían ido a ver a tu madre. ¿Temes por ellos?
Temo por mi madre, que ella sufra acoso porque de la misma manera que a mí en Cuba me acosaban casi todos los días, sé que por haber estado aquí, haber llegado aquí y haber logrado mi objetivo, mi familia podría sufrir algún tipo de acoso. de de represión.
Cuéntanos cómo viviste el 11 de julio en las calles cuando eras joven. ¿Qué viste? ¿Qué sentiste?
El 11 de julio donde vivo, en Cárdenas, fue un día histórico porque se había ido la luz, estaba lloviendo, había mucha escasez de alimentos, mucha escasez de combustible, estábamos en plena pandemia de coronavirus y entonces Siento una marcha, un grito, gente gritando “libertad, libertad, libertad para el pueblo de Cuba”, y toda la caravana pasa frente a mi casa. Y entonces le dije: “Mamá, me voy a ir, y mi mamá me dijo: “No, David, no te vayas, te vas a meter en un lío”. Le dije: “No, yo voy”, agarré un suéter y me uní a la marcha.
Nos paramos frente a la sede del partido de Cárdenas y comenzamos a gritar libertad, a gritar insultos al presidente, que queríamos un cambio, pacíficamente les preguntamos a los oficiales que estábamos allí que queríamos un cambio, que queríamos una mejora. Simplemente se rieron de nosotros.
Nos arrodillamos para pedir por favor un cambio, una libertad para el pueblo de Cuba, un cambio de gobierno, algo que pudiera mejorar el país, y lo que hicieron fue que trajeron soldados, trajeron a los del servicio militar, a esos que son obligados a hacer el servicio militar en Cuba, los trajeron para reprimirnos como pueblo y golpearon a mucha gente inocente, gente que ni siquiera estaba en la manifestación, que pasaba, los golpearon, les quitaron el cubano. bandera que teníamos y nos las tiraron al suelo.
A mí personalmente iba por la calle gritando: “Viva Cuba, queremos libertad para el pueblo de Cuba”, se me acercó un oficial y me golpeó con la porra, me golpeó por detrás, me empujaron y así Fue una persecución.
Llegó un momento en que uno de los protestantes rompió la entrada de una tienda de alimentos y todo el pueblo fue allí y comenzaron a llevarse todas las cosas. Fui y me paré frente a esa tienda también, estaba allí, tomé una caja de jugo y comencé a beberlo. Aparecí ante la cámara del noticiero cubano bebiendo la caja de jugo.
Creo que por eso me capturaron así y me interrogaron porque aparecí en la primera plana de las noticias. Después de que todos sacaron las cosas de la tienda comenzaron a venir muchas más personas y uno de los esbirros de la dictadura a dispersar la protesta masiva que había, dijo que en Playa Larga o sea en la playa donde vivo en Cárdenas. , estaban llegando barcos de Estados Unidos que se iban a llevar a quien quisiera, y era un método para que toda la gente fuera allí y dejara vacía la parte del partido, la sede del Partido Comunista de Cuba para eso no debían entrar allí, y cuando todos iban a la playa pensando que eso era verdad, que era verdad, bloquearon la entrada a la playa y empezaron a reprimir a todos los que estaban allí, a golpearlos, a hacer arrestos. masivo y todo eso hasta la noche del otro día.
Como joven recién llegado a Estados Unidos, ¿qué piensas de tu futuro? ¿Qué deseas? ¿Qué vas a hacer? ¿Qué planes tienes?
Siempre me ha gustado la fotografía, la videografía, la música; y en Cuba nunca iba a poder realizar ese sueño porque uno quiere hacer la más mínima cosa y le van a preguntar por qué quiere hacerlo, qué quiere hacer. De hecho hice una miniserie basada en los barrios de Cuba, en Cárdenas, y me llamaron muchas veces para decirme qué objetivo tenía con eso, censuraron la serie, me dijeron que la borrara, que no podía. tengo eso.
Aplastan tus sueños. En este país quiero ese sueño de hacer mis videos, música. Aquí en Estados Unidos, un país libre, sí lo podré lograr.
FUENTE: EDITORIAL/CubaNet