En el ofrendas de dia de muertos hay elementos que no pueden faltar, como el retrato del difunto, las velas, el papel picado, la fruta y algunos manjares del gusto del difunto, siendo el pan de muerto una pieza tradicional de estas fechas en la que el olor a incienso y mandarina sale de cada hogar mexicano invitando a nuestros antepasados a acercarse a degustar un manjar digno del paraíso. Pero ¿sabías que no en todo mexico el pan de muerto es igual?
Al igual que el mole o las carnitas, cada estado de la República Mexicana tiene una forma particular de presentar este pedazo de pan dedicado al difuntoque van desde el clásico pan ovalado con masa en forma de hueso encima hasta algunas presentaciones más imaginativas que juegan con la figura del cuerpo humano para rendir homenaje a los difuntos.
Por eso, en esta ocasión te daremos un paseo por los olores y sabores que las pan de muerto ha sembrado en el país, que no solo te dejarán con el antojo de un trozo de pan acompañado de un rico chocolate caliente, sino que te ayudarán a conocer cómo se percibe la muerte en otros lugares de la República Mexicana.
Despeinadas, pan de muerto típico de Mixquic
Comencemos con un pan de muerto hasta cierto punto local, pues si bien en la Ciudad de México lo más común es ver lo que para nosotros es el clásico pan de muerto, cabe señalar que en el pueblo de Mixquic existe una variedad conocida como «despeinada», que consiste en unos buñuelos de azúcar roja que acaban dando un toque animado a las ofrendas del Dia de los Muertos. Su sabor es dulce, pero sorprendentemente no enferma a los comensales, que además suelen encontrar junto a estos hojaldres espolvoreados con semillas de sésamo.
Texcoco se suma a la lista de panes de muerto con sus “conejos”
No, no nos referimos a pan de los muertos coronado con conejitos de chocolate, de hecho, este pan de muerto típico de Texcoco no tiene nada que ver con el cacao, ya que está elaborado con mantequilla, nuez, guayaba y canela, ingredientes que hacen de esta variedad una de las más aromáticas de esta lista, que tiende a debe pensarse para compensar su discreta presentación que no hace justicia a su delicioso sabor.
«Almas», un pan de muerto típico de Guanajuato
Este pan de muerto No es exclusivo de Guanajuato, ya que también se puede encontrar en otros estados, aunque su sabor en esta localidad es particularmente especial. Su nombre proviene de la forma en que se elabora la masa, que se asemeja a la figura humana, representando así “sus almas”, que ya no están en el mundo terrenal. Las «almas» que representan a los adultos están vidriadas en blanco y tienen un punto rosa en el centro, mientras que las «almas» de los infantes solo están vidriadas en el color de la pureza.
«Regañadas», un manjar que viene de Oaxaca
Este tipo de pan de muerto representa las almas de personas y animales difuntos. Su preparación consiste en una masa de hojaldre blanda, o bien, una mezcla de harina de trigo, sal, azúcar y manteca de cerdo, que se espolvorea con azúcar para darle un toque dulce a la preparación.
Del pan de muerto a los «moriscos» hidalguenses
Este pan de muerto Se elabora con harina, canela, huevo y pulque, que suele presentarse en forma de hilo, aunque lo más común es verlo en forma parecida al corazón, que se barniza y se decora con azúcar blanca y rosada. cuya consistencia final es crujiente por fuera y suave por dentro.
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